lunes, 6 de octubre de 2008

The Godfather

No, no me refiero a aquella genial película de la novela de Mario Puzo. Permitanme explicarles:

Resulta que no hace mucho tiempo, el Sr. Cavernícola se enamoro de aquella bella Srita. Cavernícola. Esta bella mujer vió que este apuesto hombre tenía todo lo indispensable para que ella, no pasara hambre y/o frío. Así que de alguna manera, él le pertenicia a ella y ella le pertenecía a él.

Pasaron unos cuantos años y a alguna buena alma caritativa de Dios se le ocurrió inventar que hombre y mujer deben unirse en sagrado matrimonio con todas las de la ley.

Y ok, vamos, hasta aquí la cosa no va mal: en otros tiempos, cierto joven, iba con cierto padre de la novia, entregaba unas cuantas cabezas de ganado y entonces ganaba el derecho de fornicar como locos formar una bella familia con ella (claro está que esto solo sucedía si la joven no había tenido ya un amorío con su, tal vez verdadero amor... pero ese es tema para otro post, que jamás voy a hacer) En ese entonces, se estilaba que el padre de la novia, pagara por tooooodaaaaa la fiesta, como si dijera: "Anda, celebremos que mi niña es una mujer y tuvo la fortuna de que un hombre la escogiera, coman y beban!!" AMEN!!!

Claro, se invitaba a amigos, familiares, conocidos, para que todos fueran participes de tan feliz momento...

Pero un día!!!, un bendito día!!!, algún orgulloso padre, algún feliz pero pobre padre dijo: "Hija mía, yo no no pagaré tu boda" ¡Acaso esta hija, abnegada quien amaba a su padre dijo algo?

¡¡¡¡NOOOOOOO!!!!

Por que en el mejor de los casos, tal vez es un novio rico. Pero, ¿y si no lo es?, ¿si esta dichosa y feliz pareja no tiene los recursos necesarios para solventar un gasto de tal magnitud? Aaaaaaaahhhhhh! pues es aquí donde entran los amigos, vecinos, primos, conocidos que, previa petición de ayuda por parte de los novios "apadrinarán" la boda, es decir, pagarán por toooodoooo lo que se les ocurra a los infelices novios...

Y aquí es donde su humilde servidor entra en la escena: accedí voluntariamente(?) a pagar parte de un pastel de bodas... Al final, por x, y, z causas no pude asistir a la boda y no pude probar el mentado pastel de bodas...

Odio tanto mi vida...

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